Vistazo al Perú, julio 2014 (7)
Más luces
Que en nuestro Estado hay también personas valiosas y con
alguna experiencia, en varias altas responsabilidades, y segmentos que
funcionan en general con mucha eficiencia, lo nota, por ejemplo, cualquier
viajero internacional con la Policía de Inmigraciones, por la facilidad –y
rapidez- para obtener o renovar pasaporte y para realizar los trámites
migratorios en el aeropuerto.
Hasta la temible SUNAT viene mejorando algunos procedimientos
de fiscalización tributaria y de aduanas –haciéndolos menos hostiles.
También es parte, aunque marginal, de nuestro Estado una
entidad como Agrobanco, que, en dos años de acertada gestión de Hugo Wiener, ha
logrado eficiencia y reconocimiento. Lo han cesado repentina- e
inexplicablemente, quién sabe por qué presiones económicas o políticas.
Cabe subrayar la vigencia plena de la libertad de expresión
y de organización, mal aprovechadas.
Aunque la mayor parte de la opinión pública está más bien a
merced de órganos de prensa y televisión claramente no enfocados en elevar el
estándar político –y ético, es positiva, también en algunos de esos órganos, la
cantidad de analistas políticos sensatos y atinados, que nos ayudan a
orientarnos. Me resultan especialmente refrescantes Richard Webb y Rolando
Arellano, por una mirada profunda, diferente a la de la mayoría de los
analistas que estimo. Ante la excesiva concentración de la prensa escrita en un
conglomerado periodístico –independientemente de la posición que tenga-, sería
fundamental, además de posibles medidas desde el Estado, la creación de al
menos un diario alternativo serio, de información imparcial y pedagogía
política. Su ausencia la suplen en parte los muchos órganos digitales, de
orientaciones y temáticas variadas, también en provincias, no solo en grandes
ciudades sino también en muchas de pequeña escala, algo notable. Y, en cierto
sentido, el control social de infinidad de personas en todo el país,
crecientemente también en zonas rurales, con cámaras, información e
interconexión.
No necesito recordarle a nadie lo que está significando la
gastronomía, con Gastón Acurio y muchos otros, para nuestra alicaída autoestima
y para la marca Perú en los mercados internacionales, su contribución a ampliar
nuestras miras respecto de la conservación de la biodiversidad y la mejora de
la nutrición, y lo mucho que aporta a generar oportunidades en todos los
sectores relacionados, en especial para el segmento de agricultura orgánica.
Esto es posible también gracias al esfuerzo de ONGs
promotoras de la agroecología, agrupadas, desde hace un cuarto de siglo, junto
con personas individuales, en la Red de Agricultura Ecológica del Perú, RAE. Y
gracias al tesón de los productores agrupados en la Asociación Nacional de
Productores Ecológicos, ANPE.
La feria anual Mistura, organizada por la Sociedad Peruana
de Gastronomía, APEGA, probablemente la mayor de Latinoamérica en su género
–que prepara su sétima edición- es una gran iniciativa. Incluye un encuentro
gastronómico internacional. Permite la interrelación de chefs y cocineros de
grandes y pequeños restaurantes de todo el país, con productores agrícolas,
principalmente agroecológicos, y con cientos de miles de consumidores, y es un
gran acontecimiento de ampliación de horizontes, de aprendizaje en negocios
gastronómicos, y en nutrición, de poderoso estímulo a la innovación, de
inducción del turismo gastronómico, y de recreación, también con espectáculos.
Tiene su correlato en el lento crecimiento de las ferias
ecológicas locales -en contra muchas veces de miopías municipales y cambios en
sus funcionarios.
Como otros tipos de actividad, menciono el festival anual
del cajón peruano, con más de mil cajoneadores en la Plaza de Armas, el
festival de cine internacional, del Centro Cultural de la PUCP, una vida
teatral intensa, etc.
Todo esto es ejemplo además de continuidad desde el sector
privado que se extraña en los proyectos del Estado.
Y, aunque es responsabilidad de una empresa alemana, LAP,
pero con personal peruano, destaco el en general buen funcionamiento del
aeropuerto Jorge Chávez, considerado el mejor de Sudamérica ya por cinco años
consecutivos.
Finalmente incluyo los catorce leones obtenidos por nuestros
publicistas en su evento internacional en Cannes, lo que nos coloca en el
ránking de los diez países más premiados del mundo. Esto contribuye a la
afirmación de la marca Perú en todos los campos y es un estímulo para elevar
también los estándares éticos de la poderosa publicidad.
Subrayo que no se trata de un análisis exhaustivo sino de
ejemplos de lo que percibo como tendencias positivas, aún débiles, pero ya no
marginales, y fortaleciéndose.
Como dice Gastón, sigamos dando batalla por nuestro Perú,
soñando en grande, y, como él, con los pies en tierra.